sábado, 30 de noviembre de 2013

LIBROS QUE HE LEIDO LA COLA DE LA SERPIENTE (Leonardo Padura)



EL AUTOR

Leonardo Padura Fuentes (La Habana, 1955) es un novelista y periodista cubano, conocido especialmente por sus novelas policiacas del detective Mario Conde. El Gobierno de España concedió en 2011 la ciudadanía de ese país a Padura, quien sigue viviendo en Cuba.

Nacido en el barrio de Mantilla, hizo sus estudios preuniversitarios en el de La Víbora, de donde es su esposa Lucía; naturalmente, estas zonas de La Habana, muy ligadas espiritualmente a Padura, se verán reflejadas más tarde en sus novelas. Padura estudió Literatura Latinoamericana en la Universidad de la Habana y comenzó su carrera como periodista en 1980 en la revista literaria El Caimán Barbudo; también escribía para el periódico Juventud Rebelde. Más tarde se dio a conocer como ensayista y escritor de guiones audiovisuales y novelista.



Su primera novela —Fiebre de caballos—, básicamente una historia de amor, la escribió entre 1983 y 1984. Pasó los 6 años siguientes escribiendo largos reportajes sobre hechos culturales e históricos, que, como él mismo relata, le permitían tratar esos temas literariamente.  En aquel tiempo empezó a escribir su primera novela con el detective Mario Conde y, mientras lo hacía, se dio cuenta "que esos años que había trabajado como periodista, habían sido fundamentales" en su "desarrollo como escritor". "Primero, porque me habían dado una experiencia y una vivencia que no tenía, y segundo, porque estilísticamente yo había cambiado absolutamente con respecto a mi primera novela", explica Padura en una entrevista a Havana-Cultura.

Las policiacas de Padura tienen también elementos de crítica a la sociedad cubana. Al respecto, el escritor ha dicho: "Aprendí de Hammett, Chandler, Vázquez Montalbán y Sciascia que es posible una novela policial que tenga una relación real con el ambiente del país, que denuncie o toque realidades concretas y no sólo imaginarias".

Su personaje Conde —desordenado, frecuentemente borracho, descontento y desencantado, "que arrastra una melancolía", según el mismo Padura— es un policía que hubiera querido ser escritor y que siente solidaridad por los escritores, locos y borrachos. Las novelas con este teniente han tenido gran éxito internacional, han sido traducidas a varios idiomas y han obtenido prestigiosos premios. Conde, señala el escritor en la citada entrevista, refleja las "vicisitudes materiales y espirituales" que ha tenido que vivir su generación. "No es que sea mi alter ego, pero sí ha sido la manera que yo he tenido de interpretar y reflejar la realidad cubana", confiesa.

Conde, en realidad, "no podía ni quería ser policía" y en Paisaje de otoño (1998) deja la institución y cuando reaparece en Adiós Hemingway (2001) está ya dedicado a la compraventa de libros viejos.

Tiene también novelas en las que no figura Conde, como El hombre que amaba a los perros (2009), donde las críticas a la sociedad cubana alcanza sus cotas más altas.

Padura ha escrito también guiones cinematográficos, tanto para documentales como para películas de argumento.

Vive en el barrio de Mantilla, el mismo en el que nació. Al preguntarle por qué no puede dejar La Habana, el ambiente de su historia, ha dicho: “Soy una persona conversadora. La Habana es un lugar donde se puede siempre tener una conversación con un extranjero en una parada de guaguas”.

EL LIBRO

Corre el año 1989 y Mario Conde, el policía cubano hastiado por las fatigas de la vida vuelve con un sorprendente caso, encargo especial de su compañera de profesión, Patricia, una china mulata. Juan Chión, padre de Patricia y otro de los personajes que encauzará los hilos de la historia junto con Francisco Chiú cuya amistad está solidificada por las experiencias del pasado.

Esta vez, y para sorpresa de los lectores fans de Padura, el decadente Barrio Chino de la Habana será uno de los principales escenarios donde se llevará a cabo la investigación de una misteriosa muerte. La víctima, un chino llamado Pedro Cuang aparece ahorcado, mutilado de un dedo y con unos extraños signos en el pecho. Las pesquisas apuntan a prácticas de brujería, tráfico de drogas e importantes cantidades de dinero oculto.
De fondo se observa una sociedad de emigrantes chinos sumida en la oscuridad del propio ser humano y la obsesión por conseguir riquezas.

Puerta de los Dragones, entrada principal al barrio chino de La Habana, en calle Zanja


IMPRESION PERSONAL

La Cola de la Serpiente no fue concebida ab initio como una más de la novelas de la saga de Mario Conde. En efecto, su génesis es un relato corto que escribió Padura en los años 90, aprovechando una investigación periodística que realizó acerca del Barrio Chino de La Habana. Y en éste contexto, Padura no se resisitió a escribir un pequeño relato de su personaje Mario Conde, buceando por las turbias aguas de ésta degradada zona del centro de la Habana. Posteriormente, el relato fue revisado y ampliado, reescrito podríamos decir,  y el resultado final ha sido una novela más de la serie de Mario Conde, cuyo contenido exponemos ahora brevemente.

Lo anterior se nota bastante en el libro, ya que es más corto que los demás que conforman la serie de Mario Conde, y en éste volumen se aprecia una menor intervención de los personajes secundarios, el Mayor Rangel, el gordo Contreras, y es de notar que no aparecen en absoluto ni su gran amigo Carlos ni su madre. Tampoco otros amigos de Conde como el Conejo o Candito el Rojo, aunque se les nombra en el libro. Significativo es también el hecho de que no aparezca ninguna mujer de las habituales en Mario Conde, tan solo al final y muy brevemente aparece Tamara, el gran amor de Conde. Los personajes chinos no aparecen suficientemente desarrollados en mi opinión, siendo solamente un esbozo, propio del relato corto que fue génesis de la presente novela.

Calle Maloja, en el degradado Centro Habana, donde Padura ubica la casa de Juan Chion


El suceso nuclear -un crimen con mutilación y ahorcamiento del cadáver- desencadena, como resulta obligado, las indagaciones que ocupan la historia. Pero lo más importante en este caso es que la víctima es un chino, y que las pesquisas de Mario Conde lo llevan a internarse en el decaído Barrio Chino de La Habana, formado en tiempos más prósperos por inmigrantes orientales que fueron acudiendo a una Cuba opulenta y lejana en busca de mejor destino; un barrio muy activo hace medio siglo, aunque convertido actualmente en una zona sórdida y envejecida donde apenas sobreviven, en condiciones paupérrimas, los herederos de aquellos inmigrantes que, en una gran mayoría de casos, soportaron una dura explotación y que han continuado aferrados al lugar en vez de seguir el camino inverso al de sus mayores.

Este retrato de “una ciudad oscura, tórrida y cada día más hostil”, de un ámbito urbano que sólo muestra signos de ruina y degradación, este callejeo de Conde por lugares casi vacíos, por solares abandonados, por habitaciones míseras, malolientes, de paredes desconchadas y llenas de cachivaches y muebles rotos, es sin duda lo más valioso de la novela. Y hay algunos personajes con los que se relaciona Conde que ofrecen historias inolvidables, como Juan Chion y Francisco Chiú, cuyo pasado común fundamenta una sólida amistad, o que asoman en bocetos rápidos y certeros, como Jacinto el Mago, el gigantesco Marcial Varona y algunos descendientes de esclavos africanos que todavía practican los oscuros ritos religiosos del palo monte. Padura conduce al lector con destreza por oscuros vericuetos en los que las antiguas historias y las pistas que no siempre orientan en la dirección adecuada se mezclan en una confusa maraña cuya explicación final es, sin embargo, diáfana, y, lejos de convertirse en un artificio mecánico para cerrar el desenlace, repercute en los más profundos sentimientos de algunos personajes. Los acartonados y previsibles tipos de muchas novelas de intriga se revisten aquí de humanidad. El resultado es un friso de figuras que deambulan por un escenario poblado por fracasados y perdedores nostálgicos, ya sean mulatos, blancos o chinos e independientemente del sector social en que se encuentren.

Virgen de Regla, mezcla única de sincretismo religioso, a caballo entre la religión católica y las antiguas religiones africanas


El propio Conde, que reúne y acentúa algunos rasgos de los antihéroes investigadores creados por la novela y el cine norteamericanos, no escapa a esa condición. Su conciencia de superviviente va unida al recuerdo de amores desvanecidos pero aún operantes -Karina, Tamara- y al de un mundo de esperanzas juveniles al que “la realidad le había robado demasiados jirones” y que no había mejorado, porque “los años no habían pasado para mejor, sino para preparar un retroceso que [...] tendría consecuencias dolorosas para el país donde había nacido y vivido” (p. 45). Son precisamente estos toques que, además de evocar una Cuba pretérita y feliz, van perfilando la humanidad del personaje -incluso con ribetes humorísticos, como en la magistral escena en que aparece Patricia Chion-, lo que trasciende los límites de la novela de intriga y la dignifica literariamente. Un placer para cualquier lector.  

ACTUALMENTE LEYENDO:  CORONA DE FLORES  (Javier Calvo)

martes, 26 de noviembre de 2013

LIBROS QUE HE LEIDO: OSCAR WILDE Y EL CLUB DE LA MUERTE (Gyles Brandreth)



EL AUTOR

Escritor, periodista, editor, presentador y guionista de televisión, dramaturgo, actor, locutor de radio y productor de teatro, Gyles Brandreth es particularmente notorio como orador, y posee el récord del discurso ininterrumpido de sobremesa más



EL LIBRO

En mayo de 1892, Oscar Wilde ya es toda una celebridad, famoso por sus fiestas y sus ocurrencias. Pero ni él mismo podría haber adivinado lo que provocaría cuando, en una reunión del club Sócrates, propone jugar al «Asesinato». Cada uno de sus invitados debe escribir en un papel el nombre de la persona a la que desearían matar. Sólo se trata de un juego, una broma macabra, por supuesto… Pero pocas horas más tarde, las catorce «víctimas» escogidas empiezan a morir, una tras otra…
Wilde no tarda en deducir que el asesino es uno de los miembros del club y, con la ayuda de sus fieles amigos Robert Sherard y Arthur Conan Doyle, deberá detenerlo si no quiere convertirse él mismo en la próxima víctima.

Desde los fastuosos salones de los selectos clubes londinenses hasta los sórdidos confines del ring de boxeo y el engañoso universo del teatro, Oscar Wilde y el club de la muerte nos ofrece una fascinante historia de pasiones, engaños y homicidios en medio de la doble moral de la sociedad victoriana.
 
 
Casa donde vivio Oscar Wilde en Tite Street, Chelsea, Londres

IMPRESION PERSONAL

La época victoriana es un marco excelente para los relatos policíacos. Si a él le añadimos la presencia de Oscar Wilde como investigador y Conan Doyle como ayudante, el cóctel resulta perfecto. Y todo ello lo ha hecho Gyles Brandreth en su saga sobre Wilde.

En esta entrega, el protagonista propone a sus amigos, reunidos en el Club Sócrates, jugar al ‘Asesinato’: cada uno debe escribir en un papel a cuál de entre ellos desearía matar. Pero, al poco tiempo, comienzan a aparecer sus cadáveres de modo inexplicable. Lo que sólo era un juego se ha convertido en horrible pesadilla. Wilde, con ayuda de Conan Doyle y un tercer amigo, deberá detener al asesino si no quiere convertirse en la siguiente víctima.

Se trata, por tanto, de una novela de intriga policíaca. Pero tiene el valor añadido de que Brandreth muestra un gran conocimiento de la biografía del escritor. Y, así, al paso que va avanzando la investigación, vamos conociendo el peculiar mundo de éste: su matrimonio, sus amistades y sus relaciones ‘especiales’, en lo que constituye un interesante retrato del extraordinario autor británico.

Por tanto, la ambientación está excelentemente lograda, con ese componente decadentista tan apropiado a la época. La prosa es ágil y los diálogos ingeniosos y el narrador ha sabido conjugar en sus dosis adecuadas historia y ficción para entregar una obra amena y divertida.

Hotel Cadogan, donde se reunia el Club Sócrates, fundado por Oscar Wilde


Lo mejor es la documentación del autor en torno a la vida de Oscar Wilde y su entorno, con la inclusión de Arthur Conan Doyle, Bram Stroker, Bosie (su supuesto amante y causante indirecto de su condena), el padre de este, el marqués de Queensbery...Creo que le retrata bien, o por lo menos la imagen que tengo de él, en sus modos (inteligente, mordaz, atractivo -no por su físico, al que le da cera de vez en cuando-) y su forma de vestir (sumamente atrevido y provocador). No toca directamente el tema de la homosexualidad, aunque si lo hace de refilón, con las dos vidas de los hijos del marqués de Queensbery.

 Nunca antes habia visto tan bien retratado, al famoso y genial Oscar Wilde, con su lenguaje tan Wilde, con diálogos maravillosos, que aunque están escritos por el autor , denotan un conocimiento impecable de Oscar Wilde, de su humor, repito genialidad, ese Wilde maravillosamente mundano, celebridad absoluta de su época, y más exactamente en 1892, año en que esta novela ocurre. Nuestro personaje metido en la doble moral victoriana, el Wilde de los grandes salones, el Wilde de los bajos fondos , del circo, del ring de boxeo ,el metiroso mundo del tearo, el de los grandes y fastuosos salones, el del clavel verde,un seductor insoportable, que hace olvidar sus feos dientes y su estatura enorme, con su hablar brillante, su pensamiento veloz , la ironía, la poesía, la champaña , los tés en el Saboy , su modo tan peculiar en el vestir. Un amante tremendo de la belleza , incapaz de quedarse frente a la fealdad y contenplarla.

Oscar Wilde y El Club De La, Muerte, es una novela de admirar pues la época está muy bien planteada, especialmente cuando muestra quienes conforman el club Socrates, Arthur Conan, autor de Sherlock Holmes, Conan Doyle quien creará el personaje del famoso ladrón Raflfes, Bram Stoker , el autor de Drácula, entre otros, todos estos grandes pesonajes, tan representativos de esa época, en el fondo romántica y decadente, como todos los finales de siglos, se mezclan en un juego, llamado el Asesinato .”Cada uno de los invitados debe escribir en un papel el nombre de la persona a la que debería matar. Solo se trata de un juego una broma macabra, por supuesto… pero horas más tarde, las catorce victimas escogidas empiezan a morir, una tras otra…”

Acantilados en Eastbourne, Sussex Oriental, en la costa sur de Inglaterra


Wilde con su inteligencia va realizando una investigación, hasta llegar al descenlace, descubriendo el asesino, no se pierdan esta novela , de misterio, histórica, adobada por el señor Oscar Wilde, bebiendo entre sorbos de champán de cinco chelines, y unos canapés fríos.

Para pasar un rato entretenido sin grandes pretensiones y para conocer y querer saber más de Oscar Wilde.

ACTUALMENTE LEYENDO:  LA COLA DE LA SERPIENTE  (Leonardo Padura)

lunes, 25 de noviembre de 2013

LIBROS QUE HE LEIDO: EL PECADO DE MIDAS (Anne Zouroudi)

 


EL AUTOR

Anne Zouroudi nació en el norte de Inglaterra, en Lincolnshire en 1959, pero a los dos años se trasladó con su familia al sur de Yorkshire.

Estudió en la Sheffield High Scholl y posteriormente trabajo en Estados Unidos, en Nueva York y Denver, Colorado. Fue allí, en Estados Unidos donde empezó a tomarse en serio su vocación de escritora y donde escribió sus primeros cuentos.

A su vuelta al Reino Unido decidió pasar unas vacaciones en una pequeña isla griega. Fue un amor a primera vista, una historia de amor con Grecia que dura ya veinte años y que pasa por su matrimonio con un griego y el nacimiento de su único hijo.

Cuando regresó a Inglaterra decidió escribir una novela ambientada en Grecia.



“El mensajero de Atenas”, (2007), recibió una excelente acogida por parte de la crítica y quedó finalista en la última edición de los Premios ITV3 y del Premio Desmond Elliot. A esta primera entrega de una serie que gira en torno a los siete pecados capitales, le sigue “The Taint of Midas”, (2008); “The Doctor of Thessaly” (2009) y “The Lady of Sorrows” (2010), todas ellas protagonizadas por Hermes Diaktoros,

En la actualidad, Anne Zouroudi reside en Derbyshire.

EL LIBRO

Durante más de medio siglo, el viejo apicultor Gabrilis Kaloyeros ha custodiado las hermosas ruinas del Templo de Apolo. Pero la especulación inmobiliaria incrementa el valor de la tierra y alguien lo convence -a través de medios poco honrados- para que renuncie a su propiedad. Pocas horas después muere de manera violenta.

 Cuando Hermes Diaktoros encuentra el cuerpo maltrecho de su amigo en una cuneta, la policía lo considera el principal sospechoso. Sin embargo, son los promotores más codiciosos que amenazan los antiguos yacimientos de la isla de Arcadia quienes resultarían más beneficiados con la muerte de Gabrilis. Hermes decide vengar a su viejo amigo y encontrar al verdadero culpable, aunque sus métodos son, como siempre, poco ortodoxos...

IMPRESION PERSONAL

Segundo libro de una serie de siete novelas policiacas protagonizadas por el detective griego Hermes Diaktoros -apodado "el Gordo"y relativas, cada una de ellas, a uno de los pecados capitales, en este caso el de la avaricia. Todo comienza con el asesinato de un viejo apicultor cuyos terrenos codicia una empresa inmobiliaria.

Estampa tradicional de las islas griegas

La obra tiene una estructura clásica y un desarrollo tranquilo, al paso marcado por un mes de agosto abrumadoramente caluroso. Personajes y entornos se describen mínimamente, supeditados a la acción, y algunas palabras y expresiones reproducidas en el idioma griego original, así como la frecuente mención de comidas y bebidas típicas del país, suponen otras tantas pinceladas exóticas con las que atraer la atención del lector. El conjunto, en el que no faltan alguna alusión al tema religioso y una venganza cometida de forma tan discreta como efectiva, puede entretener a lectores que no busquen una lectura trepidante, sino una búsqueda calmosa, entre conversaciones con unos y con otros, del culpable.

Todas las novelas se desarrollan en islas griegas imaginarias y tienen como protagonista a un extravagante personaje, Hermes Diaktoros, el Gordo, una suerte de reencarnación moderna del dios antiguo que acompañaba las almas de los muertos al Hades. No hay que olvidar que διάκτορος (mensajero) era uno de los epítetos del dios Hermes. En esta ocasión el Gordo se ve implicado personalmente en la trama, ya que la historia se inicia con la muerte por atropello de un viejo amigo suyo. Muerte que coincide con la llegada a la isla de Diaktoros, después de varios años de ausencia. La investigación posterior descubrirá una compleja trama de intereses en la que están implicados un empresario y promotor inmobiliario ávido de riquezas, unos funcionarios corruptos y un periodista dispuesto a sobornar a cualquiera con tal de obtener una buena noticia. Frente a ellos un viejo sargento de policía se mantiene fiel a sus principios e intenta transmitírselos a su joven compañero. La presencia de Hermes Diaktoros servirá para inclinar la balanza del lado de la justicia y hacer que los culpables paguen su culpa en un desenlace que tiene algo de tragedia griega.
 
Efectos de la especulación inmobiliaria en las islas griegas
 

Aunque la novela peca quizás de exceso de moralina, ilustra muy bien los desmanes que la especulación urbanística y la industria turística han cometido en muchas zonas del litoral mediterráneo. Sirve también para añadir nuevos perfiles y matices al enigmático personaje protagonista. Ya veremos qué nos deparan las próximas entregas de la serie.

ACTUALMENTE LEYENDO:  OSCAR WILDE Y EL CLUB DE LA MUERTE (Gyles Brandreth)

viernes, 22 de noviembre de 2013

LIBROS QUE HE LEIDO: NADIE VALE MAS QUE OTRO (Lorenzo Silva)



EL AUTOR

Lorenzo Manuel Silva Amador nació el 7 de junio de 1966 en un edificio hoy demolido del antiguo hospital militar Gómez Ulla, en el barrio de Carabanchel de Madrid.
Estudió Derecho en la Universidad Complutense y ejerció  como abogado, tras pasar un año como auditor de cuentas y otros dos como asesor fiscal en una firma multinacional, pero a finales de los noventa decidió  colgar la toga y dedicarse de lleno a la literatura.

 Lorenzo Silva es hijo y nieto de militares. Ambas circunstancias permiten suponer que su conocimiento interno del funcionamiento de la Benemérita será bastante más amplio que el de la mayoría de los lectores.



Desde que iniciara su dedicación a la literatura,  ha cultivado diferentes géneros:


Novela:

La flaqueza del bolchevique (finalista del Premio Nadal 1997).
Noviembre sin violetas.
La sustancia interior.
El urinario.
El ángel oculto.
El nombre de los nuestros.
Carta blanca (Premio Primavera 2004)
Niños feroces.
Algún día, cuando pueda llevarte a Varsovia.
El cazador del desierto.
La lluvia de París.
 

Y, por supuesto, la serie de novela policíaca protagonizada por los guardias civiles Bevilacqua y Chamorro:


El lejano país de los estanques, 1998 (Premio Ojo Crítico 1998).
El alquimista impaciente, 2000 (Premio Nadal 2000).
La niebla y la doncella,2002
Nadie vale más que otro, 2004
La reina sin espejo 2005.
La estrategia del agua, 2010
La marca del meridiano, 2012. (Premio Planeta 2012)

Relatos:
El déspota adolescente.

Libro de viajes:
Del Rif al Yebala. Viaje al sueño y la pesadilla de Marruecos.

Libro-reportaje:
Al final, la guerra, junto a Luis Miguel Francisco

Ensayo:
El Derecho en la obra de Kafka.
Sereno en el peligro. La aventura histórica de la Guardia Civil (Premio Algaba de Ensayo).

Su obra ha sido traducida al ruso, francés, alemán, italiano, griego, catalán y portugués.

Como guionista de cine, ha escrito junto a Manuel Martín Cuenca la adaptación a la gran pantalla de la novela La flaqueza del bolchevique.

EL LIBRO

En Nadie vale más que otro, Lorenzo Silva nos convierte de nuevo en testigos privilegiados de las pesquisas de los célebres Chamorro y Bevilaqua pero en esta ocasión el lector tendrá la oportunidad de adentrarse en cuatro casos diferentes en los que se pondrá en juego la pericia y perspicacia de esta pareja de investigadores de la Guardia Civil. El asesinato de una mujer en el que todas las sospechas recaen en un marido con un largo historial de malos tratos, la violación y muerte de una niña, el hallazgo de un cadáver de un delincuente común donde todo parece indicar que se trata de un ajuste de cuentas y el crimen contra un inmigrante en un pequeño pueblo son los cuatro asuntos que tienen como nexo, además de suceder todos en periodos estivales, el hecho de ser crímenes tan cotidianos como los que se leen a diario en los periódicos, alejados de la extravagancia y de la sofisticación y, en consecuencia, tan reales como la vida, o la muerte, misma. Casos, no obstante, en los que la línea recta no es necesariamente el camino más corto y en los que casi nada es lo que a simple vista parece.
 
Lorenzo Silva nos ofrece cuatro relatos contundentes, sin fuegos de artificio, en los que demuestra que la cotidianidad y la realidad pueden ser la base para la mejor literatura

 
 
IMPRESION PERSONAL
 
Este libro aunque pudiera parecer que es la cuarta entrega de esta saga, en realidad y según palabras del escritor sino la recopilación de cuatro relatos de sus personajes como protagonistas que fue realizando entre medias de sus libros principales. Ideas o pequeños casos a los que fue dándoles forma de una manera u otra y que luego se quedaron en eso, en simples relatos. Reunirlos en un libro fue quizás la manera de hacerlos llegar a los  seguidores de la saga de una manera ordenada pues estaban dispersos en diversas publicaciones.Tal vez sea un poco de marketing y un mucho de homenaje pues en el año de su publicación se cumplían 10 años del nacimiento de sus dos personajes.

Lorenzo le da nombre al libro aprovechando el título del primer relato, "Nadie vale más que otro" que en palabras del escritor, quizás en esa, consista la filosofía de cara a las personas que gasta el sargento Vila.
 
En el primer relato volvemos a encontrarnos como siempre con un cadáver a las primeras de cambio y es que hasta el momento en todos los libros ha sido así por lo que creo que es una pauta fija en el autor. Aunque es un relato relativamente corto, no esta falto de fuerza, es una gran historia con grandes dosis de investigación donde Vila y Chamorro tendrán que hilar muy fino para ir descubriendo las pistas que al final le llevarán al culpable. 

El segundo relato trata sobre el brutal asesinato de una niña en un pequeño pueblo rural, lo que provoca más si cabe el asombro y el escandalo. El sargento y su compañera Chamorro tendrán ante sí un caso complicado debido la particular colaboración de la familia y a su forma de ser. Todo esto unido a que en todo momento deberán ir con pies de plomo debido a las circunstancias añadidas a un suceso tan horrible. Un caso sobrecogedor muy bien narrado pero que para mi gusto tiene menos gancho y menos misterio que el primer relato ya que tiene mucha base científica y menos deductiva.

En la tercera historia, nuestros dos agentes se trasladaran a un pueblo de Toledo donde una mujer ha sido asesinada a hachazos y su marido es el principal sospechoso. Un relato interesante sobre sentimientos, con diálogos muy buenos y reflexiones aún mejores pero creo que el más flojo de todos en cuanto a acción ya que es el menos movido de todos.

 
La última investigación será en otro pueblo pequeño, donde un joven sudamericano aparece asesinado. Un pueblo donde la población inmigrante ha aumentado y existe un número bastante considerable de ellos y una autentica diversidad de nacionalidades, las autoridades pretenden que se resuelva pronto el asesinato para tranquilizar a la población y se deje claro que se castigará a quien traspase la linea de la ley. Tengo que reconocer que este relato es muy exótico y cuenta con momentos bastante estelares por lo que el libro concluye con un relato digno de un gran final.
De sobra nos advierte el autor que estos casos siguen dos lineas comunes, la primera es que se desarrollan en el periodo estival las cuatro y la segunda que no son casos de personas importantes como en las otras novelas de Silva, quizás lo de importantes le venga grande a la explicación, tal vez deberíamos llamarles personajes notorios por su condición social o por el puesto de trabajo que desempeñaban. Son con estos relatos con los que el autor nos lleva a seguir una tesis fácil de comprender, en cualquier lugar,cualquier día o cualquiera puede cometer un crimen, ya sea por drogas, pasional, por despecho u horrendo porque sí, son hechos que ocurren todos los días, la prostitución, las drogas, la pedofilia, la xenofobia, que conviven con nosotros y un día la mecha prende y aquel tranquilo vecino o la persona que menos esperaba no cuenta hasta diez y comete un crimen que tendrá sus sobremesa de gloria en el telediario y luego olvidaremos en la memoria hasta que otro caso semejante nos sobrecoja, o ese día cambiemos de canal por el simple hecho de no querer mirar aunque debemos recordar que estos sucesos siempre están ahí aunque no nos enteremos o los ignoremos.

Por lo demás sigue siendo un gusto ver como se compenetra esta pareja, como Vila nos hace participes de sus quejas, de los precarios medios de los que dispone y de los milagros que les piden, de la fachada falsa de la política y de como analizando a los culpables hasta les encuentra un hueco por el que tratar de comprender o compadecerlos. Eso sí, como el dice, si en este país la gente contará hasta diez antes de hacer ciertas cosas, tal vez él no tendría trabajo.

Una lectura muy entretenida que se llega a leer en una tarde de piscina o de sofá obligado por la lluvia que nos mantendrá agarrados al libro sin quererlo soltar al menos hasta acabar cada capítulo y que sirve para ver como opera un cuerpo de seguridad a la hora de desarrollar las investigaciones pertinentes.

ACTUALMENTE LEYENDO:  EL PECADO DE MIDAS  (Anne Zouroudi)

martes, 19 de noviembre de 2013

LIBROS QUE HE LEIDO: EL MISTERIO DE LAYTON COURT (Anthony Berkeley)



EL AUTOR

Anthony Berkeley Cox (5 de julio de 1893 - 9 de marzo de 1971), escritor británico del género policial. Escribió bajo varios nombres: Francis Iles, Anthony Berkeley, y A. Monmouth Platts. Berkeley era muy prominente entre los escritores de la delincuencia de su tiempo (la Edad de Oro del Detective de Ficción), y estaba estrechamente relacionado con los otros en este campo, incluidos los de Agatha Christie, Dorothy L. Sayers, y G. K. Chesterton en el Club de los Detectives.



Nació en Watford, Inglaterra. Educación: Sherborne School; University College de Londres. Servido en el ejército durante la Primera Guerra Mundial.  Periodista: contribuyente a Punch y El humorista, Londres, y revisor suplente de John O 'London's Weekly, 1938, y, como Francisco Ilies, revisor para el Daily Telegraph, en la década de 1930, El Sunday Times después de la Segunda Guerra Mundial, y el Guardian de mediados de los años 1950 a 1970.

EL LIBRO

Nos encontramos a principios de S.XX y Víctor Stanworth, un anciano solterón, afable y simpático en apariencia invita a una serie de personas a pasar el verano en su típica mansión inglesa, Layton Court.  los invitados disfrutan de agradables paseos, horas del té deliciosas y la compañía de unos y otros y parece que van a pasar un verano estupendo. Pero claro, si fuera así nos quedaríamos sin historia y sin libro, ¿no? Y precisamente por eso, una mañana el anfitrión de la casa aparece muerto en la biblioteca. Aparentemente se trata de un suicidio ya que todas las puertas y ventanas están cerradas por dentro y el cadáver aún conserva la pistola en la mano, pero… hay alguien, un invitado, que no tiene muy claro que las cosas hayan ocurrido como dicen todos y este invitado, el irónico escritor Roger Shringham, se va a dedicar a darle vueltas al asunto hasta no dejar ningún cabo suelto.



IMPRESION PERSONAL

Miembro, junto a Dorothy L. Sayers o Agatha Christie, del selecto club de escritores de misterio de los años treinta, Anthony Berkeley aportó al género hondura y refinamiento psicológicos y creó un detective atípico e inolvidable: Roger Sheringham, novelista de éxito y detective amateur a sus horas. Layton Court es una mansión de campo, propiedad de Victor Stanworth, impecable anfitrión que ha invitado a unos cuantos amigos a pasar unos días. Una mañana, Stanworth aparece muterto en la biblioteca y nadie puede concluir si se trata de un suicidio o de un asesinato. Entre los invitados se encuentra Roger Sheringham, que rápidamente se decide a investigar el caso. El lector sigue paso a paso la investigación apasionante del detective, sin ser apartado de sus reflexiones, en un ejercicio literario y criminológico tan original como adictivo. Anthony Berkeley demuestra en esta novela un sofisticado gusto y una aguda inteligencia para urdir una obra de alto entretenimiento, fruto de la época más feliz del género.

Típica mansión de la campiña inglesa


 Roger Shringham es un personaje simpático, algo pedante, hay quien dice que como homenaje al gran Sherlock Holmes, y tremendamente testarudo. Él está convencido de que el señor Stanworth no se ha suicidado y a pesar de las apariencias y de las pruebas va a mover Roma con Santiago para estar seguro. Va a contar con la ayuda de su amigo Alec, a quien cariñosamente equipara al doctor Watson y que aporta una segunda voz interesante en las cavilaciones. El resto del reparto, por decirlo de alguna manera, tampoco decepciona, guarda secretos y sorpresas y nos intriga desde el primer momento y el misterio y el desenlace, bueno, no está mal, es original en algunos aspectos aunque un poco flojo en otros.

 
Pub rural en Inglaterra


 El misterio de Layton Court es casi una comedia por su tono desenvuelto y su aparente frivolidad. Se trata de una intriga casi convencional (elegante anciano, caballero inglés rodeado de invitados en su mansión, aparece suicidado en la biblioteca) con unas características muy definidas. Primero: cumple a rajatabla la norma de poner en manos del lector lo mismo que el detective sabe, pero, además, lo va haciendo sobre la marcha; es decir: no disimula pistas que el lector ha de encontrar sino que lo obliga a acompañar al detective paso a paso, pues ambos van descubriendo lo mismo a lo largo del relato. Segundo: crea un detective clásico que se define por su inteligencia, su jovialidad, sus simpáticos errores y su decidida voluntad, propia de un sportman, de superar todos los obstáculos. Tercero: la frivolidad se revela en realidad como un estilo limpio, claro y directo de organizar con cuatro elementos una trama cada vez más enrevesada que al final se revuelve sobre sí misma con un remate del mejor gusto torero. Y cuarto: es uno de los mejores desarrollos que he leído del clásico enigma de la habitación cerrada. Evidentemente, la novela pertenece a la tradición -o etapa- del género que considera la obra como un juego entre el lector y el autor. En esta época de oro, la lógica se asociaba al juego (lejos de la estricta exigencia de lógica estricta y pura de la etapa anterior, comandada por R. Austin Freeman) y bien podemos decir que su divisa fue "usted puede ser el detective", modo en el que implícitamente se establecía el juego. Berkeley es un autor indispensable en la biblioteca de cualquier amante del género, pero, además, como los más afines de sus compatriotas (Sayers, Chesterton, Innes, Blake...), es un novelista de verdadera altura literaria. Al español se lo vertió en la mítica colección de Borges y Bioy El Séptimo Círculo: toda una carta de presentación para un clásico indiscutible.

ACTUALMENTE LEYENDO:  NADIE VALE MAS QUE OTRO  (Lorenzo Silva)

lunes, 18 de noviembre de 2013

LIBROS QUE HE LEIDO: LA BUSQUEDA DE CARLOMAGNO (Steve Berry)



EL AUTOR

Steve Berry es un escritor estadounidense nacido en el año 1955. Tras estudiar sus estudios secundarios en un colegio católico, cursó la carrera de Derecho en la Escuela Walter F. George de la Universidad de Mercer, ubicada en Macon, estado de Georgia.
 
 
 
Debutó como novelista con “La Habitación De Ámbar” (2003), intriga histórica sobre la búsqueda de unos valiosos paneles de ámbar pertenecientes a la época de los zares de Rusia que fueron robados por los nazis cuando invadieron la Unión Soviética.

En “La Profecía Romanov” (2004) fabulaba con una vuelta del zarismo a Rusia tras la caída del comunismo, la inhumación de los restos del zar Nicolás II y su familia, y el descubrimiento de la falta de dos de los cadáveres de los hijos del mandatario ruso.
   
En “El Tercer Secreto” (2005) indagaba en los mensajes de la Virgen de Fátima.
Después de estas novelas Berry centró su obra en la figura de Cotton Malone, un ex agente secreto que se introduce en diversas intrigas de carácter histórico. La primera fue “Los Caballeros De Salomón” (2006), con los templarios en primer plano.

Más tarde publicó “La Traición Veneciana” (2007), con Malone enfrentado a una amenaza biológica, “La Conexión Alejandría” (2007), sobre la famosa biblioteca de Alejandría, “The Charlemagne Pursuit” (2008), la búsqueda de un submarino que le lleva a la Antártida, y "El Club de Paris", “The Paris Vendetta” (2009).

EL LIBRO

Una civilización desconocida enterrada bajo el hielo de la Antártida esconde un misterio que Carlomagno dejó escrito. Un secreto revelador y de una gran importancia para la humanidad está a punto de ser descubierto... Cotton Malone intenta descubrir la verdad sobre su padre, que murió en un submarino que se perdió en el Antártida en los años 70. Pronto aparecen otros involucrados en la búsqueda: dos gemelas alemanas y un aliado del presidente de los EE.UU. Pero cada uno de ellos tiene sus propios motivos. Después de investigar pistas en un par de iglesias antiguas en Alemania y Francia descubren pruebas de una civilización desconocida y muy avanzada que vivía en la Antártida antes de que desapareciera cubierta por el hielo. Una novela trepidante, una búsqueda épica que llevará al lector desde Alemania, hasta Francia, EE.UU. y Antártida.

Interior de la Catedral de Aquisgrán (Actual Alemania)


IMPRESION PERSONAL

‘ La búsqueda de Carlomagno’ , de Steve Berry (ed. Planeta, 2011) es una nueva aventura protagonizada por Cotton Malone, con los ingredientes propios de la serie, acción, aventura, crímenes y enigmas históricos.

En esta ocasión, Cotton se encuentra en la cima de la montaña más alta de Alemania, dispuesto a enfrentarse a unos fantasmas que llevaba casi cuarenta años intentando evitar. Ha acudido para resolver un misterio ‘ que lo obsesionaba desde el día en que unos hombres vestidos de uniforme fueron a decirle a su madre que su esposo había muerto’ . En el año 1971 su padre, capitán de fragata y oficial al mando de un submarino, desapareció sin que fuese localizado.


A lo largo de su carrera profesional Cotton había intentado tener acceso al informe que había redactado la Comisión de Investigación. Cuando perteneció al JAG, el cuerpo de abogados de la Marina, no le dejaron verlo porque era material clasificado. Tampoco tuvo suerte el tiempo que trabajó como agente del Departamento de Justicia, a pesar de tener acreditación para acceder a áreas restringidas.

Territorio de Nueva Suabia, en la Antártida, anexionado por la Alemania nazi en 1938

Ahora, una vez que había abandonado el Departamento por un incidente ocurrido dos años antes en México y se había trasladado a Copenhague donde abrió una tienda de libros antiguos, una deuda pendiente le va a permitir hacerse con el anhelado informe.

El encuentro en Alemania le hará comprender que hay personas interesadas en que el informe no salga a la luz y que la investigación va a resultar peligrosa, poniendo su vida en juego. La lectura del informe le hará descubrir que todo lo que contaron fue mentira, la realidad es que su padre iba al mando de un submarino secreto cumpliendo una misteriosa misión en la Antártida.

Comienza así una extraordinaria aventura que tiene como clave principal un enigmático documento de la época de Carlomagno que podría esconder el secreto sobre una civilización que habitó en la Antártida antes de desaparecer cubierta por el hielo.

Integrantes de la expedición alemana a la Antártida en 1938


Cotton se encontrará con varios personajes, movidos por diferentes intereses, pero todos con la intención en descifrar el contenido del documento. El mismo presidente de los Estados Unidos se mostrará interesado en averiguar la verdad.

La novela tiene un ritmo trepidante y mezcla con acierto realidad y ficción, aclarando al final el autor qué aspectos son realmente históricos en la narración. Civilizaciones desaparecidas, los nazis y la Ahnenerbe, el mapa de Piri Reis, el Manuscrito Voynich, enigmas científicos, documentos codificados... son muchos los ingredientes atractivos de una narración que nos hará viajar por varios países en la búsqueda de un secreto fascinante.

ACTUALMENTE LEYENDO:  EL MISTERIO DE LAYTON COURT  (Anthony Berkeley)

lunes, 11 de noviembre de 2013

LIBROS QUE HE LEIDO: SECRETO DE ESTADO I - LA ALCOBA DE LA REINA (Juliette Benzoni)



EL AUTOR

Juliette Benzoni nació en París y pasó su infancia en Saint-Germain-des-Prés. Estudió en el elegante College d'Hulst, donde nació su horror a las matemáticas y su pasión por la historia y las letras. Tras un breve periodo en la prefectura del Sena, donde trabajó como auxiliar, se encontró casada con un médico de Dijon, con dos niños e inmersa en la sociedad burguesa. En esa etapa de su vida Juliette Benzoni pasó horas en las bibliotecas estudiando la historia de su país.

Algunos años después de la liberación, Juliette perdió a su marido y se instaló en Marruecos. Allí se encargó de la redacción publicitaria en Radio Internationale, donde conoció al capitán Benzoni, con quien se casó. De regreso en París, se dedicó al periodismo, trabajando simultáneamente para L'Histoire pour tous, Journal de Dimanche y Confidences. Allí publicó la primera de sus novelas históricas, y ya no dejó de escribir. A su popular serie Catherine siguieron numerosas sagas —entre ellas Secreto de Estado, publicada con gran éxito por Vergara— totalizando una cincuentena de libros. Es la autora francesa más popular dentro del género de la ficción histórica, y sus lectores suman más de cincuenta millones en todo el mundo. Varias de sus obras han dado lugar a películas para la televisión.



EL LIBRO

Francia, junio de 1626. Una niña de cuatro años vaga por el bosque : su nombre es Sylvie de Valaines y su familia ha sido asesinada. Un muchacho de diez años, François de Borbón-Vendôme, la encuentra y la lleva al castillo de Anet. Oculta tras un nuevo nombre y criada entre los Vendômes, Sylvie se convertirá en doncella de honor de la reina Ana de Austria y compartirá, sin quererlo, el mortal secreto del nacimiento del futuro Luis XIV.  Tendrá que enfrentarse a fuerzas poderosas, y también al misterioso y sádico asesino de su madre.

Juliette Benzoni es una de las escritoras más populares de Francia. Se han vendido alrededor de cincuenta millones de ejemplares de sus libros en todo el mundo. Esta serie la componen: La alcoba de la reina, El rey de Les Halles y El prisionero enmascarado.

IMPRESION PERSONAL

Secreto de Estado es una trilogía escrita por la francesa Juliette Benzoni. Los títulos de los libros son: La Alcoba de la Reina, el Rey de Les Halles y el Prisionero enmascarado. Cuando hablo de una trilogía, o en concreto, de ésta trilogía, no me refiero a tres libros independientes, que puedan leerse por separado, sino que se trata de una única historia, cuya narración ocupa tres volúmenes.

Dejando aparte ésta advertencia a futuros lectores, hay que decir que la ambientación histórica es, sencillamente magistral. Los personajes históricos están muy bien retratados y los ficticios son bastantes creíbles y coherentes con el relato y la época en que suceden los hechos.

Plano de Paris en el siglo XVII


La lectura es bastante amena, pese a narrar hechos ocurridos hace casi cuatrocientos años. La autora permite al lector conocer bastante bien esa Francia turbulenta de principios del siglo XVII, llena de intrigas y traiciones. La realidad social del país, pese a que casi toda la trama se desarrolla entre personajes de la alta nobleza, está también muy bien perfilada, permitiéndonos conocer la ropa que vestían, lo que comían y en que empleaban sus ratos de ocio los franceses de dicha época.

Cardenal Richelieu, Primer Ministro de Francia y uno de los personajes centrales del relato


En cuanto a la intriga, decir que hay varias historias que se van entrecruzando a medida que se desarrollan los personajes. Es interesante y amena, pero desgraciadamente tendremos que esperar a leer el tercer volumen de la serie para conocer el desenlace final.

En resumen, una muy buena novela histórica, documentada, estudiada, bien estructurada y bastante bien escrita. Recomendable.

ACTUALMENTE LEYENDO:  LA BUSQUEDA DE CARLOMAGNO  (Steve Berry)